
Estudió pintura en Bellas Artes y tuvo la oportunidad de realizar exposiciones de sus hermosos trabajos, tales como: Jesús y la niña, La Dama del Poncho , La Virgen del Rosario, el Señor de los Milagros, algunos Bodegones, arcángeles, paisajes naturales entre otros. Una de sus obras más grandes y que hoy por su edad le es difícil terminar es la del: rey Salomón y la reina de Saba, pintura que alcanza los dos metros y medio de largo por 1. 60 de ancho, ella lo toma como un gran reto el cual va a terminar y es cierto pues a Dorita le encantan los retos y sabe que lo que se propone lo hace, como ella cuenta la vida y sus experiencias le enseñaron mucho a ser más despierta y lúcida, cosa que demuestra a su edad de 79 años.

Al fallecer su padre, Dorita hereda gran parte de la colección de libros que él poseía, muebles, imágenes y sobretodo el amor por preservar y cuidar el patrimonio y su arte, no se llegó a casar por decisión propia ( a causa de una experiencia que la hizo desisitir del matrimonio y noviazgo) su destacada labor en la empresa donde trabajaba trascendió al tiempo pues hace algunos años ( cuenta Dorita) su antiguo jefe la visitó y le ofreció volver a trabajar con ellos a lo que Dorita prefierio no aceptar pues no le gusta mucho utilizar las máquinas de computadora ya que su trabajo siempre fue directo y personal en cuanto a su profesión de contadora. En gracia de su gran trabajo en la empresa logró el favor de su ex jefe para remodelar y dé mantenimiento al albergue de la Beneficencia Pública de Lima ubicado en Jr. Ica donde hoy vive, acción que fue muy apreciada por todos. Al verse enferma y no tener a quién dejar sus posesiones optó por donar parte de sus colecciones de libros a la Biblioteca Nacional, cuando estuvo en tratamiento su espacio en el albergue quedó desolado y al recuperar su salud y regresar a su albergue se dio con la sorpresa que muchas de sus cosas ya no estaban ahí ( muebles antiguos y algunos libros) por ello decide salvar su colección haciendo donación de parte de ellos. Hoy Dorita sigue tan lúcida y conversadora como hace unos años cuando la conocí, cada cierto tiempo la visito y conversamos mucho, hace poco la invité a visitar el antiguo Palacio del Conde de Villar de Fuente o Palacio de Barbieri del cual me contó muchas historias pues resulta que también conoció a don Fernando Barbieri y me lo describe tal y como ella lo recuerda. El día que visitó el palacio de Barbieri fue una experiencia emocionante tanto para ella como para mí pues muchos recuerdos más llegaron a su mente y recorrió cada espacio, cada salón y quedó admirada de ver que las imprentas que una vez se alojaron en sus interiores ya no están y hoy deja ver su belleza casi tal y como cuando ella la conoció desde pequeña.
Iván: Cómo conoció a don Fernando Barbieri?:
Dorita: Cuando era niña, mi señor padre me llevaba a la casa donde él trabajaba, era una casa muy hermosa y antigua que tenia dos piletas , a mí me gustaba jugar con el agua de las piletas y un señor alto y colorado siempre me regalaba algún dulce o frutas para comer, fué ahí donde lo conocí, mi padre era muy buen amigo de él, el señor Barbieri era muy religioso y después de ir a misa en la iglesia de san José en Barrios Altos, iba a visitar a mi padre a la casa y a veces se quedaba a almorzar con nosotros.
Iván: Qué recuerdos tiene del trabajo de su padre en el palacio de Barbieri?
Dorita: El señor Barbieri siempre le tenía trabajos a mi padre, una vez le pidió que le preparara unas planchas de madera tallada para adornar un patio, también su comedor y un balconcito que mandó poner en el patio de los azulejos, ese patio era bonito porque parecía un bosque por las plantitas que tenía en muchas macetas.
Iván: Qué piensa sobre el trabajo de rescate del palacio de Barbieri?
Dorita: Es algo maravilloso que jóvenes como ustedes se estén interesando por rescatar las casas antiguas de Lima, me da mucha pena que muchas otras casonas hayan caido en malas manos y hayan sido saqueadas y destruidas. Me parece que el señor Barbieri te ha llamado para que rescates su casa y tengo fe que lo vas a lograr.
Iván: Dejaría un mensaje para los jóvenes de hoy en día en cuanto al cuidado de las casonas y su patrimonio?
Dorita: El mejor mensaje que puedo darles es que sigan el buen ejemplo de grandes personas que lucharon por conservar lo que nuestros padres nos dejaron, es bonito leer y enterarse que todo el Damero de Pizarro tiene historia y sus casonas son fieles testigos de eso, cuando conocemos nuestra historia y nos identificamos con ella comenzamos a amar y cuidar lo que nos pertenece, ustedes los jóvenes son el futuro en que el pasado se cobija, cuidenlo mucho y no sean como esos cacasenos que no saben cuidar el valor del pasado ( risas)
Iván: Agradezco mucho su tiempo Dorita y agradezco mucho también el que me haya transmitido tantos recuerdos vividos, es un gran lujo y placer el conocerla y saber que sigue siendo un gran ejemplo de vida, dedicación, arte e historia. Buenas tardes,
Dorita: Buenas tardes Iván, Dios te bendiga y ayude en que tengas éxito en tus labores