El corazón del palacio de BARBIERI es como siempre digo, el salón Dorado presidido por el hermosamente tallado altar de la Virgen y el Niño Jesús ( hoy desaparecido) un espacio lleno de historia y sentimientos reunidos que emulan la santidad de su esencia. Cada detalle en plata y pan de oro son muestra del amor dedicado con que son Manuel Fernando transmitió su amor y devoción por la Virgen y por su amada casa. Hoy el altar desalmadamente profanado luce vacío y sin vida dejando una tristeza profunda para quienes lograron conectarse con la presencia de Barbieri quien nunca pensó que robarían su amado palacio.
Texto: Iván Ulloa - Palacio de Barbieri/Valoración y Rescate